Como niños soñamos e idealizamos a los ser superheroes, descubrimos esos seres fantásticos con poderes especiales, que con gran entereza resuelven cualquier dificultad gracias a sus grandes dotes y en ocasiones a la unión de la suma de ellos. ¿Pero de donde nacen, cómo se crearon, donde se localizan? Descubrirás que se encuentran en el lugar menos esperado.

Quién no quisiera tener el poder del mentalismo para resolver los problemas solamente a través de procesos mentales, o el de la telequinesis, que nos permitiría mover cosas sin tocarlas y sin apelar a una causa física. Yo en lo particular amaría el de la multiplicación, el poder estar en varios lugares al mismo tiempo. Pero quizás tu preferencia seria volar, transformarte o teletransportarte. Seguramente en este momento estas pensando en cómo utilizarías todos esos superpoderes en tu vida diaria. Acaso no seria muy práctico para poder recoger a los niños mientras haces la comida y tomas cafe con las amigas; o disfrutar un domingo con la familia y estar con tu otro yo en un sport bar viendo el futbol con tus cuates; no se diga entregar los reportes del trabajo con solo llevar  acabo un proceso en tu mente, y así, mil cosas. Lo que no nos detenemos a pensar es que en realidad todos contamos con superpoderes. ¡Si¡, todos tenemos destrezas y habilidades que nos hacen extraordinarios. Que nos hacen superheroes y te describiré algunos de ellos para que tu mismo lo compruebes.

Telepatia

¿Cuantas veces con solo una mirada hemos enviado mensajes ocultos, con gente alrededor?, ¿cuántas veces hemos leído los pensamientos o descubierto las intenciones de alguien sin una sola palabra?, bueno pues esto es la telepatía, poner un pensamiento en la cabeza de alguien para que actúe distinto o meterse en la mente de alguien para descubrir sus intenciones. 

La invulnerabilidad.

Esa capacidad para ser inmune a todo tipo de daño lo manifestamos con nuestra resiliencia, el poder de afrontar los desafíos de la vida diaria y continuar. Que mejor ejemplo que todos los que sobrevivimos a una enfermedad o incluso a la pandemia.

Super velocidad.

Esa sensación de moviento extremo todos lo hemos vivido. Hemos experimentado la sensación de correr y “traspasar muros” cuando se nos hace tarde, solo recuerda la última vez que tuviste que cumplir con mil pendientes durante el día y lograste tu objetivo y hasta en tiempo record. 

Invisibilidad

Aunque no es un poder tan dinámico como los otros por su sutileza, en ocasiones es muy útil. Con este poder hemos podido escuchar conversaciones privadas, esquivar a gente que no queremos ver y pasar desapercibido en ciertas circunstancias, ¿quién no ha utilizad este poder?

Cambiar de forma

Acaso no hemos modificado nuestra apariencia cientos de veces, y no solo para asistir de una fiesta a un partido de soccer, sino incluso en nuestro comportamiento. Somos seres que vivimos una metamorfosis constante al transformar nuestra apariencia física para adecuarla a nuestra identidad síquica y circunstancias.

Podríamos definir que cualquier superpoder mejora nuestros sentidos, y en general así lo es, pero aún y con todos estos superpoderes que hemos practicado sin conciencia, existen otros con los que contamos y que son igualmente excepcionales. Me refiero a aquellos que nos fueron dados y que conocemos como dotes, y los que hemos ido adquiriendo con el paso de las experiencias y aprendizajes y a los que nombramos habilidades.

Es importante que reconozcamos en nosotros mismos todo lo que nos hace únicos y especiales, sin la necesidad de que otros lo reconozcan y nos hagan los personajes principales de sus películas mentales. Nosotros tenemos que aprender a reconocer y descubrir cuáles son nuestros superpoderes, alimentarlos, acrecentar su potencialidad y mejorarlos diariamente.

Quizás tu superponer es la constancia y persistencia para conseguir algo, el mantener ese ideal en tu cabeza y del que no claudicas, tal como tu empresa, el hacer que tus hijos culminen una carrera universitaria, o tu dinámica familiar.

O podría ser la entereza, ese poder que descubres cuando te has enfrentado a una serie de vicisitudes y sin saber cómo o por dónde, has encontrado la fortaleza para salir airoso..

Puede ser que tengas el poder de la generosidad y que no solo encuentres el placer de agradecer por todo lo que tienes sino que además tienes el poder de compartir, de dar, de mostrar amor y empatía por todo y todos los que te rodean.

Quizás cuentes con el poder de la creatividad, haciendo que todas esas ideas y cosas que pones en tu mente, se vuelvan una realidad.

También podrías contar con el superponer del altruismo, el que hace que tus acciones vayan encaminadas a una causa que beneficia a otros sin esperar recompensa.

Puedes seguramente bajo una autoevaluación, descubrir cuáles son tus superpoderes, pero lo más importante es que los reconozcas y que veas en ti que en realidad eres un superhéroe, porque utilizas todos tus recursos, habilidades y fortaleza, para enfrentar el mundo diariamente, aunque sin capas ni máscaras. ¡Asi que asombrate!, porque los verdaderos supeheroes los vemos todos los dias y lo somos todos los dias.