El rebozo es una de las máximas expresiones de la vestimenta femenina en Mexico, es un complemento que acompaña a la mujer mexicana desde hace muchos años y en muchos pueblos y comunidades, pero que también se ha adaptado a diferentes círculos y circunstancias, desde ser un elemento fabricado en algodón en telares tradicionales, hasta ser piezas elaboradas con finos materiales y confeccionado por renombrados diseñadores para ser utilizados en galas y eventos especiales.

Su origen se atribuye a los habitantes del municipio de Tenancingo, Estado de México y de Santa María del Río, San Luis Potosí, cuya parte de su cultura y tradición es la elaboración artesanal de esta prenda.

Se especula que el rebozo fue resultado del mestizaje, en los inicios de la creación de la Nueva España y cuyo elaboración se atribuyó principalmente a la mujer mestiza, que en su momento contaba con una particular distinción social.

Su aparición data de hace 500 años, resultado de la vorágine resultante de la evangelización y colonización, sin embargo también se presume que ya había algunas piezas similares antes de que los españoles arribaran a tierras americanas. Con la evangelización, las mujeres indígenas comenzaron a usar un tipo de manto y para la época colonial surgió el rebozo como una prenda distintiva. El pintor paisajista Dr. Atl, apuntaba que la creación del rebozo fue trabajada por “Las necesidades de identidad de casta y el gusto indígena, para lograr convertirlo en una prenda típica y nacional”.

Se concibió de una forma rectangular, tejida con hilos de algodón, seda, artisela o una mezcla de estos, y teñido con una técnica prehispánica conocida como ikat. Se fueron así realizando combinaciones de colores y diseños tradicionales con nombres como calabrote, Rosita, rosarito, culebrilla calado y otros más.

En el municipio de Tenancingo, en el Estado de México, año con año se lleva a cabo la tradicional Feria del Rebozo durante el mes de septiembre, donde maestros reboceros, ganadores de varios galardones a nivel nacional, se reúnen en el centro del municipio Tenancingo de Degollado para demostrar su extraordinario trabajo al público nacional y extranjero.

En las fiestas patrias el rebozo es la prenda tradicional más utilizada por las mujeres, los color que varía de el blanco, el verde y rojo, en estas fechas, se combinan con otros tantos representativos del rico colorido de nuestra cultura mexicana.

Cada que se ve un rebozo, es fácil transportarse a las tradiciones, la cultura y a las fiestas patrias mexicanas, exaltando ese sentimiento de nacionalismo.

Todos coincidimos en que el rebozo es una prenda de la cultura mexicana, ya sea para su uso diario o para lucir en ocasiones especiales. Son prendas que nunca pasarán de moda y que siempre tendrán una historia en los núcleos familiares y en el acervo de todos los mexicanos.