Los cambios son parte del proceso de la vida, y seguramente muchos de nosotros hemos experimentado cambios difíciles que nos hacen sentir inseguros ante la forma de afrontarlos. Quizás ha sido el mudarse a otro país, una separación o un divorcio, la perdida o un cambio de trabajo la falta de ingresos o podrían serlo todos, como ha sido mi caso, lo cierto es que es que lo único constante en la vida, es el cambio. Por lo que es importante aprender a enfrentarlos.

Cuando tuve la oportunidad de mudarme a los Estados Unidos, sufrí incertidumbre y surgieron muchas inseguridades, tenia que integrarme a una nueva cultura, aprender un nuevo idioma, hacerme de nuevos amigos y salir a enfrentar un mundo que solo conocía en vacaciones y a través de películas, pero la necesidad hace al maestro, descubrí que era capaz de hacer y desarrollar habilidades que incluso desconocía en mi, me enfrenté a mis miedos y fantasmas, algunos los superé con éxito y otros están en proceso, pero siempre me preguntaba ¿Qué es lo que me detenía a dar los siguientes pasos para avanzar? y entendí que era el miedo.

A menudo nuestra mente se bloquea frente a ciertos momentos difíciles y nos preguntamos si somos capaces de enfrentarlos y de superar las circunstancias., pero si te detienes a preguntarte por un momento ¿En cuantas ocasiones te has enfrentado a un cambio drástico y cómo lo has superado?, vendrán a tu presente respuestas favorables y descubrirás que siempre has encontrado la forma, la ayuda y las herramientas para superarlos, porque las cosas nunca son únicamente de la forma en que las vemos, siempre hay otras salidas y otras perspectivas, y depende en mucho del punto de vista con que las abordes.

Si la gran limitante es el miedo, habrá que distinguir el origen de él, si es un miedo sano o un miedo tóxico como señala Jericó.  “El primero es sinónimo de prudencia y aparece puntualmente, es aquel que invita a pensar las cosas antes de precipitarse y que te protege ante posibles peligros. Y el segundo es aquel que paraliza a la hora de tomar decisiones importantes, frena el talento y los intereses de las personas y se prolonga en el tiempo. Es el que lleva a la histeria colectiva o a no dormir por las noches” añade. Debemos elegir entonces cuál es para iniciar nuestro punto de partida.

Después de este análisis es vital encontrar una motivación para superar el cambio. Eso dependerá en mucho de nuestra historia personal. El plantearnos ¿Qué lograré haciendo tal o cual cosa?. Quizás mejorar mi situación económica, quizás encontrar una pareja que me aprecie en la medida de mis valores, quizás reforzar la confianza en mi misma, quizás la oportunidad de realizar un sueño o mejorar mi vida personal y la de mi familia. Cualquiera que sea tu motivación, es 100 % válida y será una de las razones más importantes para enfrentarse a un cambio.

Si vemos los cambios como una oportunidad y tenemos la motivación necesaria, sabrás que uno de los componentes básicos para obtener buenos resultados en este proceso es el empeño y la dedicación. Busca crear una nueva historia, nuevos ambientes, entornos más adecuados y estar alerta a nuevas oportunidades y formas de aprendizaje.  Por un momento pensarás que no tienes los recursos necesarios, pero recuerda que los recursos están en ti, que cuentas con fortalezas  -que quizás como en mi caso, ni siquiera conocías- y que como dice el dicho: “Cuando el alumno esta listo, el maestro aparece”. Verás que las oportunidades se abren y aprenderás de todas estas nuevas experiencias. 

Ahora el paso será hacer una lista de nuevas opciones y buscar las maneras de ejecutarlas.

La acción y la constancia es un camino escabroso y difícil y en ese proceso muchos declinan y se abaten, pero aliméntate de tus motivos para continuar. Busca un equilibrio congruente entre tus acciones y tus metas para conseguir los resultados que deseas y rodéate de gente que te apoye y te enriquezca en todas las areas.

Y por ultimo confía plenamente en ti. Generalmente lo que más nos falta en estos procesos es la confianza en nosotros mismos. Convéncete de que eres más fuerte de lo que crees, el amor propio no es una zalamería, es un poder vital que te ayuda a reinventarte y a superar cualquier cambio. El desafío mas grande es convencerse uno mismo de lo que somos capaces. Así, que ¡Si, confía en ti!

Los cambios nos ocurren a todos, así que alístate para enfrentarlos.

Y como dijera Timothy Ferriss, este exitoso joven empresario y autor:  “Las estrellas nunca se alinean ni todos los semáforos se ponen en verde al mismo tiempo. El universo no conspira contra ti, pero tampoco está para ponerte las cosas fáciles. Las condiciones nunca son las ideales. El “antes o después” es algo que nunca te llevará a cumplir tus sueños. Las listas de pros y contras tienen casi el mismo efecto. Si algo te importa y quieres hacerlo “antes o después”, hazlo ya. Ya tendrás tiempo de corregir tus errores a lo largo del camino”.