Por Bessel van de Kolk MD

La carrera y el enfoque de Bessel se ha centrado en estudiar cómo los niños y los adultos se adaptan a los eventos traumáticos en sus vidas. 

En 1984 creó un centro clínico de investigación, el primero de su tipo centrado en estudiar el tratamiento del estrés traumático en la población civil y a partir del cuál ha escrito en varias publicaciones científicas. Su primer libro “El Cuerpo Lleva la Cuenta” ha sido leído por más de 1 millón de personas y traducido a varios idiomas desde su publicación en 2015.

“El Cuerpo Lleva la Cuenta” aborda cómo los pacientes con PTSD (Trastorno de estrés postraumático) experimentan un trauma recurrente durante los años posteriores a la exposición traumática. Estos pacientes continúan experimentando respuestas de estrés graves, mucho más allá del período de los eventos que afectaron sus vidas.

Sabemos que el PTSD afecta significativamente el bienestar físico, generalmente con el aumento de la presión arterial, la alta frecuencia cardíaca y el aceleramiento de la respiración, pero también impacta considerablemente en el funcionamiento social, lo que puede provocar depresión, cambios de personalidad, desconexión social, pesadillas y otros trastornos en la conducta.

Bessel explora la idea de que el estrés traumático está en la raíz de la neurociencia, ya que está asociado con cambios funcionales y químicos en la parte emocional del cerebro.

Bessel presenta en este libro historias de víctimas con un enfoque único, como el de un veterano de la guerra de Vietnam que constantemente revivía acontecimientos traumáticos que no lograba borrar de su memoria. Bessel trabajó con él y descubrió que el yoga era una valiosa herramienta para ayudarle a recuperar su sentido de control, demostrando en un estudio posterior, que el yoga consciente reduce significativamente el PTSD.  Esto fue un enfoque revolucionario en comparación con las formas tradicionales que incluían principalmente el uso de antipsicóticos y tranquilizantes. 

Ahora, con terapias expresivas a través del lenguaje, el arte, la música, el yoga, la danza y más, se puede motivar a las personas a encontrarse a sí mismas y descubrir sus identidad, más allá de sus traumas. También es una manera maravillosa de reconectarse con familiares y amigos, lo que puede ayudar a las personas a sentirse seguras en la lucha contra su PTSD.

Bessel hace un trabajo maravilloso al utilizar enfoques científicos y filosóficos para explicar la compleja neurobiología y la conexión entre el cerebro, el cuerpo y la mente, y brinda guías útiles que todos podemos usar en nuestras propias vidas.