En el corazón del sur de México, se encuentran dos estados que encarnan la esencia misma de la riqueza cultural, histórica y natural del país: Oaxaca y Chiapas. Con su combinación única de antiguas ruinas, vibrantes tradiciones indígenas, exuberantes selvas tropicales y playas paradisíacas, esta región ofrece a los viajeros una experiencia inolvidable llena de descubrimientos y aventuras.

Desde las calles empedradas de la Ciudad de Oaxaca hasta las majestuosas pirámides de Palenque, cada rincón de Oaxaca y Chiapas están impregnado de historia y belleza. Sumérgete en la cultura zapoteca y mixteca en Monte Albán, maravíllate con las cascadas turquesas de Agua Azul en Chiapas, y déjate seducir por la deliciosa gastronomía local que te espera en cada esquina.

En este artículo, te llevaremos en un viaje virtual a través de los tesoros escondidos de Oaxaca y Chiapas, explorando sus lugares más emblemáticos, descubriendo sus secretos mejor guardados y ofreciéndote consejos prácticos para planificar tu propia aventura en este fascinante rincón de México.

Oaxaca:

Estado de Oaxaca, cuyo nombre proviene del náhuatl “Huaxyacac”, que significa “en la nariz de los huajes”, tiene una historia que se remonta a miles de años atrás. Antes de la llegada de los españoles, la región estaba habitada por diversas culturas indígenas, incluidos los zapotecas, mixtecos y mazatecos, que dejaron un legado impresionante de arte, arquitectura y tradiciones. Durante la época colonial, Oaxaca fue un importante centro de producción agrícola y artesanal, y su riqueza atrajo a numerosos conquistadores y colonos. Hoy en día, el estado de Oaxaca sigue siendo un crisol de culturas, donde las tradiciones indígenas y la influencia colonial se entrelazan para crear una identidad única y vibrante.

Ciudad de Oaxaca:

La aventura comienza en la vibrante Ciudad de Oaxaca, fundada en el siglo XVI por los españoles sobre las ruinas de una antigua ciudad zapoteca llamada Huaxyacac. Rodeada de montañas y valles, la ciudad es un crisol de culturas donde conviven las tradiciones indígenas con la influencia colonial. Aquí, la impresionante Catedral de Santo Domingo, construida sobre un templo zapoteco, y el exuberante Jardín Etnobotánico de Oaxaca, que alberga una impresionante colección de plantas medicinales y rituales de la región, son visitas obligadas.

Monte Albán:

A poca distancia de la ciudad se encuentran las impresionantes ruinas de Monte Albán, la antigua capital de los zapotecas. Fundada alrededor del año 500 a.C., Monte Albán fue uno de los centros ceremoniales más importantes de Mesoamérica. Entre las pirámides y los templos, los viajeros pueden sentir la grandeza de esta civilización precolombina mientras exploran los restos arqueológicos y disfrutan de las vistas panorámicas de los valles circundantes.

Pueblos Mágicos y Bahías de Huatulco:

Explorar los Pueblos Mágicos de Oaxaca es sumergirse en la autenticidad de la cultura local. En Hierve el Agua, los viajeros pueden maravillarse con las impresionantes cascadas petrificadas y disfrutar de vistas espectaculares de la Sierra Madre. En Mazunte y Zipolite se puede visitar el Centro Mexicano de la Tortuga y aprender sobre la conservación de estas criaturas marinas. Además, las Bahías de Huatulco, con sus playas vírgenes y aguas cristalinas, ofrecen un refugio paradisíaco para los amantes del sol y el mar, con actividades como snorkel, buceo y avistamiento de ballenas. Puerto Escondido, es un paraíso playero famoso por sus olas perfectas para surfear y su ambiente relajado. Es el destino ideal para los amantes de la playa y la aventura.

Gastronomía Oaxaqueña:

La gastronomía de Oaxaca es una delicia para los sentidos. Los viajeros pueden disfrutar de platos tradicionales como el mole negro, las tlayudas, los tamales oaxaqueños y los chapulines, mientras exploran los mercados locales y prueban las delicias culinarias de la región.

1.- Mole: El mole es uno de los platillos más emblemáticos de Oaxaca. Hay varias variedades, como el mole negro, el mole coloradito, el mole amarillo y el mole verde. Cada uno tiene una combinación única de ingredientes, como chiles, especias, chocolate, frutas y semillas.

2.- Tlayudas: También conocidas como “pizza oaxaqueña”, las tlayudas son tortillas de maíz grandes y crujientes que se cubren con frijoles, quesillo (queso oaxaqueño), carne, aguacate, tomate y chile.

3.- Tamales: Los tamales oaxaqueños son famosos por su tamaño y sabor. Pueden estar rellenos de diferentes ingredientes, como mole, pollo, carne de cerdo, verduras o chapulines (saltamontes).

4.- Chapulines: Los chapulines son una delicia culinaria única de Oaxaca. Estos insectos se sazonan con limón, sal y a veces chile, y se sirven como aperitivo crujiente y sabroso.

5.- Quesillo: El quesillo oaxaqueño es un queso fresco y elástico hecho de leche de vaca. Se utiliza en una variedad de platillos, como las tlayudas y las empanadas.

6.- Enchiladas Oaxaqueñas: Estas enchiladas se preparan con tortillas rellenas de pollo deshebrado, se bañan en salsa de chile pasilla y se sirven con lechuga, aguacate, queso fresco y crema.

Artesanía: La artesanía de Oaxaca es una expresión vibrante de la rica cultura y tradiciones de la región. Desde los coloridos alebrijes tallados a mano hasta la alfarería tradicional y los textiles intrincadamente tejidos, cada pieza cuenta una historia única y refleja la habilidad artística de los artesanos oaxaqueños. Con técnicas transmitidas de generación en generación, la artesanía de Oaxaca es una manifestación de la creatividad y el ingenio del pueblo oaxaqueño.

1.- Alebrijes: Figuras talladas y pintadas a mano en madera de copal, que representan criaturas imaginarias con colores vibrantes y diseños intrincados. Son una de las artesanías más emblemáticas de Oaxaca y son muy apreciadas por su belleza y creatividad.

2.- Alfarería: Oaxaca es famosa por su alfarería, que incluye una amplia variedad de cerámica como ollas, platos, cazuelas y jarrones. Los alfareros oaxaqueños utilizan técnicas tradicionales y decoraciones únicas que reflejan la rica historia y cultura de la región.

3.- Textiles: Los textiles oaxaqueños son conocidos por sus colores brillantes y sus diseños geométricos y florales. Las comunidades indígenas de la región producen una amplia gama de textiles, incluyendo tapetes, huipiles (blusas), rebozos y sarapes, utilizando técnicas de tejido ancestrales.

4.- Barro negro: Originario de la comunidad de San Bartolo Coyotepec, el barro negro es un tipo de cerámica caracterizada por su color oscuro y su acabado brillante. Los artesanos moldean y pulen el barro a mano para crear una variedad de piezas, como vasijas, jarrones y esculturas.

5.- Tallas de madera: Otra forma de arte popular en Oaxaca son las tallas de madera, que incluyen máscaras ceremoniales, figuras religiosas y esculturas decorativas. Estas tallas se realizan principalmente en madera de copal y cedro, y a menudo están pintadas a mano con colores brillantes.

6.- Hoja de lata repujada: Los artesanos de Oaxaca utilizan la hoja de lata para crear hermosas piezas repujadas, como lámparas, espejos, marcos de fotos y decoraciones de pared. Esta técnica decorativa le da a la hoja de lata una nueva vida, transformándola en obras de arte únicas y brillantes.

Estas son solo algunas de las artesanías más destacadas de Oaxaca, cada una reflejando la creatividad, la habilidad y la rica tradición cultural de la región.

Estado de Chiapas

Conocido como “Chiapan” en lengua náhuatl, tiene una historia igualmente rica y diversa. Antes de la llegada de los españoles, la región estaba habitada por diversas culturas indígenas, como los mayas, los zoques y los chiapanecas, que dejaron un legado cultural impresionante, incluidas las ruinas arqueológicas dispersas por toda la región. Durante la época colonial, Chiapas fue escenario de conflictos entre españoles, indígenas y grupos rebeldes, y su posición estratégica como puerta de entrada al mundo maya la convirtió en un punto clave en la historia de la conquista española. Hoy en día, Chiapas es conocido por su diversidad étnica y cultural, así como por su impresionante belleza natural, que atrae a viajeros de todo el mundo en busca de aventuras y experiencias auténticas.Desde las calles empedradas de Oaxaca hasta las profundidades de la selva chiapaneca, un viaje a esta región es una experiencia inolvidable que dejará a los viajeros con recuerdos para toda la vida.

Continuamos nuestra aventura en Chiapas:

San Cristóbal de las Casas:

Enclavada en las montañas de Chiapas, San Cristóbal de las Casas es una joya colonial llena de encanto. Fundada en el siglo XVI por los españoles, la ciudad conserva su arquitectura colonial y su ambiente bohemio. Los viajeros pueden perderse en sus calles empedradas, visitar sus iglesias centenarias como la Iglesia de Santo Domingo, con su impresionante arquitectura barroca, y explorar sus bulliciosos mercados como el Mercado de Santo Domingo, donde pueden encontrar una variedad de productos locales y artesanías tradicionales. Aquí se puede visitar la comunidad indígena San Juan Chamula.

Lagunas de Montebello:

Este parque nacional es conocido por sus impresionantes lagunas de colores, que van desde el azul turquesa hasta el verde esmeralda. Los visitantes pueden explorar las lagunas en bote, practicar senderismo por los senderos naturales y disfrutar de la belleza natural del lugar.

Lagunas de Agua Azul:

En el corazón de la selva chiapaneca se encuentran las impresionantes Lagunas de Agua Azul, donde las cascadas de agua turquesa crean un paisaje de ensueño. Los viajeros pueden nadar en las pozas de agua fresca, hacer senderismo por los senderos naturales que rodean las lagunas o simplemente relajarse y disfrutar de la belleza natural del lugar.

Recorrido por la Sierra:

Un viaje por las montañas de Chiapas es una experiencia inolvidable. Los viajeros pueden visitar las comunidades indígenas de la región, como los tzotziles y tzeltales, y aprender sobre sus tradiciones ancestrales, como la elaboración de textiles y la medicina tradicional. Además, pueden explorar los impresionantes paisajes de la Sierra Madre, con sus bosques nubosos, ríos cristalinos y cascadas escondidas.

Chiapa de Corzo:

Este pintoresco pueblo es conocido por su arquitectura colonial y su impresionante fuente de estilo mudéjar en el centro de la plaza principal. Los visitantes pueden explorar las calles empedradas, visitar la iglesia de Santo Domingo y tomar un paseo en lancha por el Cañón del Sumidero.

Cañón del Sumidero:

Navegar por el imponente Cañón del Sumidero es una aventura que deja sin aliento. Las paredes de roca de hasta 1,000 metros de altura crean un paisaje espectacular que se puede explorar en barco. Durante el recorrido, los viajeros pueden avistar una variedad de vida silvestre, como cocodrilos, monos araña y aves exóticas, mientras aprenden sobre la historia natural y geológica del cañón.

Palenque:

El viaje culmina en Palenque, donde las misteriosas ruinas mayas emergen entre la selva. Fundada alrededor del año 100 a.C., Palenque fue una importante ciudad maya conocida por su arquitectura monumental y su avanzado sistema de acueductos. Explorar los templos y las pirámides antiguas es sumergirse en la historia y la grandeza de esta civilización perdida. Los viajeros pueden maravillarse con la arquitectura de lugares como el Templo de las Inscripciones, donde se encontró la tumba del rey Pakal, y el Palacio, con sus intrincados relieves y su torre observatorio. Además, pueden visitar el Museo de Sitio de Palenque para aprender más sobre la historia y la cultura de la región.

Gastronomía de Chiapas:

1.- Cochito Chiapaneco: El cochito chiapaneco es un platillo típico de la región, consiste en carne de cerdo adobada con achiote y cocida en un horno bajo tierra.

2.- Pozol: Esta bebida tradicional se elabora con maíz cocido, molido y fermentado, y se sirve frío. Puede ser dulce o salado y a menudo se acompaña con cacao.

3.- Tortillas de Maíz Azul: El maíz azul es una variedad única que se utiliza para hacer tortillas en Chiapas. Estas tortillas tienen un sabor ligeramente dulce y se sirven como acompañamiento o base para varios platillos.

4.- Sopa de Pan: Esta sopa consiste en caldo de pollo con pedazos de pan remojados en él. Se sirve caliente y es reconfortante y deliciosa.

5.- Tamales Chiapanecos: Al igual que en Oaxaca, los tamales son populares en Chiapas. Se pueden encontrar tamales dulces y salados, rellenos de ingredientes como pollo, carne de cerdo, frijoles, chile y frutas.

6.- Empanadas de Chipilín: Estas empanadas están hechas con masa de maíz y rellenas de chipilín, una hierba comestible típica de Chiapas. Se fríen y se sirven como aperitivo o acompañamiento.

Artesanías más representativas de Chiapas: Estas son solo algunas de las artesanías más destacadas de Chiapas, cada una reflejando la creatividad, la habilidad y la rica tradición cultural de la región.

1.- Textiles: Chiapas es famoso por sus textiles coloridos y elaborados, que incluyen huipiles (blusas), rebozos, bufandas, mantas y cortinas. Estos textiles están tejidos a mano en telares tradicionales utilizando técnicas ancestrales y diseños indígenas únicos.

2.- Bordados: Los bordados son una parte integral de la cultura chiapaneca, con diseños que representan motivos florales, animales, y figuras geométricas. Las comunidades indígenas de Chiapas, como los tzeltales y los tzotziles, son conocidas por sus habilidades en el bordado y producen una amplia variedad de prendas y accesorios bordados a mano.

3.- Máscaras: Las máscaras talladas en madera son una parte importante de la tradición cultural de Chiapas, especialmente en las celebraciones religiosas y festivales indígenas. Estas máscaras representan personajes mitológicos, animales y figuras religiosas, y a menudo están decoradas con colores vibrantes y detalles intrincados.

4.- Cerámica: La alfarería es otra forma de arte popular en Chiapas, con una variedad de piezas que van desde vasijas y ollas hasta figuras decorativas y esculturas. La cerámica chiapaneca se distingue por su estilo único y su decoración colorida, que a menudo incorpora motivos tradicionales indígenas.

5.- Tallas en madera: Los artesanos chiapanecos tallan hermosas figuras y esculturas en madera, utilizando técnicas tradicionales transmitidas de generación en generación. Estas tallas representan animales, figuras religiosas y escenas de la vida cotidiana, y a menudo están pintadas a mano con colores brillantes.

6.- Pinturas en tela: Los artistas chiapanecos crean hermosas pinturas en tela que reflejan la naturaleza exuberante y la rica cultura de la región. Estas pinturas a menudo representan paisajes, escenas tradicionales y figuras indígenas, y están disponibles en una variedad de estilos y tamaños.

En estos dos Estados de Mexico hay varias culturas indígenas vibrantes y fascinantes que los visitantes pueden explorar y aprender sobre su historia, tradiciones y formas de vida. Aquí hay algunas de las culturas indígenas que se pueden visitar en ambos estados:

En Oaxaca:

1.- Zapotecos: Los zapotecos son una de las culturas indígenas más antiguas de México. Aún hoy, hay comunidades zapotecas en el valle de Oaxaca y en otras regiones del estado. Lugares como el Valle de Tlacolula y el Valle de Ocotlán son conocidos por sus tradiciones zapotecas, donde los visitantes pueden aprender sobre su historia, cultura y artesanías.

2.- Mixtecos: Los mixtecos son otra cultura indígena importante en Oaxaca. Se encuentran principalmente en las regiones montañosas del estado, donde han conservado muchas de sus tradiciones ancestrales. Lugares como la región de la Mixteca Alta son conocidos por sus comunidades mixtecas y su rica historia.

3.- Huaves: Los huaves son una cultura indígena única que se encuentra en la región del Istmo de Tehuantepec. En lugares como Juchitán de Zaragoza, los visitantes pueden aprender sobre la historia y las tradiciones de los huaves, así como disfrutar de su arte y gastronomía distintiva.

En Chiapas:

1.- Tzeltales: Los tzeltales son una de las comunidades indígenas más grandes de Chiapas y se encuentran principalmente en la región de los Altos de Chiapas. Lugares como San Juan Chamula y Zinacantán son conocidos por sus comunidades tzeltales, donde los visitantes pueden aprender sobre sus tradiciones religiosas, artesanías y formas de vida.

2.- Tzotziles: Los tzotziles son otra comunidad indígena importante en Chiapas y se encuentran principalmente en la región de los Altos de Chiapas y en los alrededores de San Cristóbal de las Casas. En lugares como San Juan Chamula y San Andrés Larráinzar, los visitantes pueden aprender sobre la cultura tzotzil y visitar mercados locales donde se venden productos tradicionales.

3.- Lacandones: Los lacandones son una comunidad indígena que habita en la selva Lacandona en el norte de Chiapas. Aunque su población es pequeña, los visitantes pueden aprender sobre su forma de vida tradicional y su relación con la selva en lugares como la Reserva de la Biosfera Montes Azules.

Aquí tienen algunas recomendaciones sobre transporte para tu viaje a Oaxaca y Chiapas:

Transporte dentro de Oaxaca:

1.- Avión: Si vienes de fuera del país o de una distancia considerable, puedes volar al Aeropuerto Internacional de Oaxaca, que está ubicado a las afueras de la ciudad de Oaxaca. Desde allí, puedes tomar un taxi o un servicio de transporte al centro de la ciudad.

2.- Autobús: Otra opción es tomar un autobús desde otras ciudades de México. Oaxaca tiene una terminal de autobuses bien conectada con destinos en todo el país. Hay autobuses de lujo y económicos disponibles, y el viaje puede ser una experiencia cómoda y pintoresca.

3.- Transporte local: Una vez en la Ciudad de Oaxaca, puedes moverte fácilmente a pie o en transporte público. Hay taxis y colectivos (camionetas compartidas) que recorren la ciudad y sus alrededores. También puedes alquilar un coche si prefieres tener más flexibilidad para explorar la región.

Transporte de Oaxaca a Chiapas:

1.- Autobús: La forma más conveniente de viajar de Oaxaca a Chiapas es tomar un autobús. Hay varias empresas que ofrecen rutas entre las dos regiones, con opciones de autobuses de lujo y económicos. El viaje puede durar varias horas, dependiendo del destino en Chiapas.

2.- Avión: Si prefieres ahorrar tiempo, también puedes tomar un vuelo desde Oaxaca a Tuxtla Gutiérrez, la capital de Chiapas. El Aeropuerto Internacional de Tuxtla Gutiérrez está bien conectado con Oaxaca y ofrece vuelos diarios entre las dos ciudades.

3.- Alquiler de coche: Otra opción es alquilar un coche en Oaxaca y conducir hasta Chiapas. Esta opción te brindará flexibilidad para explorar la región a tu propio ritmo, pero ten en cuenta que el viaje puede ser largo y requerirá planificación adicional.

Transporte dentro de Chiapas:

1.- Autobús: Una vez en Chiapas, puedes utilizar el autobús como principal medio de transporte para desplazarte entre las diferentes ciudades y destinos turísticos. Chiapas cuenta con una red de autobuses bien desarrollada y hay servicios disponibles para llegar a lugares como San Cristóbal de las Casas, Palenque, y el Cañón del Sumidero, entre otros.

2.- Taxis y colectivos: En las ciudades y pueblos de Chiapas, encontrarás taxis y colectivos que te llevarán a tu destino deseado. Asegúrate de acordar el precio antes de abordar y de utilizar servicios de taxis autorizados y seguros.

3.- Excursiones y tours: Para visitar lugares más remotos o realizar actividades específicas, como excursiones a las ruinas mayas de Palenque o al Cañón del Sumidero, puedes unirte a excursiones organizadas o contratar servicios de tours locales.

A medida que llega el final de nuestro viaje por Oaxaca y Chiapas, nos encontramos reflexionando sobre la profunda impresión que estos lugares han dejado en nuestros corazones. Desde los antiguos templos de Monte Albán hasta las místicas selvas de Chiapas, cada rincón de esta tierra nos ha susurrado historias de tiempos pasados y nos ha invitado a contemplar la belleza eterna de la naturaleza.

En este viaje, hemos sido testigos de la vida cotidiana de las comunidades indígenas, hemos saboreado los sabores auténticos de la cocina local y hemos sido acogidos por la calidez y la hospitalidad de la gente de esta región. Nos hemos sumergido en la esencia misma de la cultura mexicana y hemos encontrado una conexión profunda con la tierra y sus habitantes.

Al despedirnos de Oaxaca y Chiapas, llevamos con nosotros no solo recuerdos tangibles, sino también un sentido renovado de asombro y gratitud por el mundo que nos rodea. Nos vamos con el corazón lleno de experiencias y la certeza de que siempre habrá más por descubrir en este hermoso rincón del planeta.

Así que, si alguna vez sientes el llamado de la aventura o el deseo de conectar con la naturaleza y la cultura, te animamos a que te aventures a Oaxaca y Chiapas. Aquí, encontrarás mucho más que destinos turísticos; encontrarás un hogar lejos de casa y un refugio para el alma.