Emiliano Zapata, es una de las figuras históricas más reconocidas en México y en los Estados Unidos, como uno de los héroes de la Revolución Mexicana y como él portavoz de los campesinos, ya que su lucha representó la reclamación de dos derechos vitales: Tierra y Libertad.
Debido ha ello se han llevado a cabo múltiples representaciones de su imagen, algunas conservadoras y otras muy controvertidas como la obra titulada “La Revolución,” del pintor Fabián Cháirez, en la que ahoga y sofoca la idea del líder y héroe mexicano, al exhibirlo como un hombre afeminado, con sombrero rosa, tacones, y montando un caballo que muestra una erección escandalosa. El objetivo expresado por el pintor es “dar su versión” en contra de la extrema masculinización de los héroes mexicanos.
El resultado, sin embargo, es en realidad una caricaturización derivada de la fama y reconocimiento del General Zapata, para el pueblo mexicano.
Aunque la familia de General considera la pintura como una difamación al carácter y la presencia histórica del mismo, el propio Presidente de la República Mexicana declaró que “En el arte no hay censura.”
Llegando a un acuerdo ante la controversial pintura, se concluyó no utilizar la obra en la impresión de pósters y folletos, pero si su permanencia en la exhibición en el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura, adjunto a una declaración de la familia del General, en la cual expresan su total oposición a la obra.
Ante los ojos de muchos críticos, la controvertida obra es un sacrilegio histórico que se convierte en un meme que insulta, trivializa y ataca la imagen, no solo del General Zapata, sino del pueblo mexicano en sí. Más entendible sería definir la pintura como una fantasía homo-erótica del autor.
Queda sin embargo la pregunta ¿Es justo que al crear arte, éste pueda ser ofensivo o incluso falsear la imagen de un personaje?
El General Zapata no es, sin embargo, la primera o última figura pública que es objeto de la visualización artística no apropiada u ofensiva por parte de un artista.
Uno de los nuevos casos de sacrilegio histórico a través del arte, es el que se desarrolla ahora en Brasil, donde un programa presentado por la cadena Netflix ha resultado en violencia contra los autores del especial en el que se caracteriza a Jesucristo como homosexual, por lo que las oficinas centrales de Porta dos Fundos, fueron atacadas con bombas Molotov.
Sabiendo que el escándalo vende y que la libertad de expresión les protege, algunos artistas extrean sus obras de personajes altamente reconocibles y respetables.
En el balance al efecto final, ¿Cuándo puede considerarse arte de alto nivel y cuándo una estratagema para convertirse en centro de atención?
Después de todo Da Vinci, Van Gogh, Rembrandt, MIchelangelo, Monet, Cezanne, Picasso, Rivera y Siqueiros nunca requirieron de valerse de este tipo de argucias para lograr obras, que ahora son patrimonio mundiales.
Tenemos que reconocer, sin embargo, el valor artístico de las nuevas aportaciones, aunque flechen negativamente nuestras sensibilidades.
Jose Rosario González
Ejecutivo de la industria de la música, ex-vicepresidente de Sony Music, cantante, compositor, arreglista y productor.