Un instinto y conducta del ser humano que no sólo garantiza la preservación de la especie, sino la plenitud suprema, es el amor. Pero la pureza de este sentimiento se manifiesta también a través de múltiples expresiones como ocurre con una buena y estimulante comida. Y esa mezcla maravillosa creció cuando los españoles con sus mitos y fantasías llegaron a México para describir y exponer algunos ingredientes originarios.
Así, por ejemplo, el capiusco o pimiento que los indígenas de la Española llamaban ají y que los mexicanos orgullosamente llamamos chile, y en la lengua del Cuzco denominan uchu, fue uno de los más notables hallazgos del jesuita José de Acosta, quien afirmó que si se comía demasiado podría tener ruines efectos porque de suyo es muy cálido y humoso, por lo que su mucho uso es perjudicial para la salud y mayormente para el alma. Y la verdad es otra, pues pica y condimenta nuestra comida y proporciona vitaminas e incluso previene el envejecimiento.
Se describe así el pimiento como el fruto de una solasánea, aunque no existe unanimidad sobre el punto de vista para fijar el número determinado de especies que hay, pues algunos científicos hablan de una cantidad muy elevada y otros la reducen.
Como sabemos, el capisco es originario de la América meridional, aunque prevalece una discusión que lo disputa entre Brasil y México, en el que sin duda este último gana, debido a que de sus tierras se extendió a todo el continente Americano hasta llegar al viejo mundo tras el descubrimiento de América por los españoles.
Algunas de sus cualidades son el sabor ardiente de algunas variedades debido a que contiene un alcaloide que se llama “capsina”. Además de que son plantas medicinales debido a su acción rubificante. Usados con moderación en la cocina tienen una actividad sin duda benéfica de tipo digestivo y hasta anestésico.
En la cocina mexicana el chile es un elemento imprescindible en la confección de un gran número de platillos.
Existen muchos tipos, los más conocidos son el ancho, bola, cascabel, cuarsemeño, cuicateco, chilacate, chihuatle, chipotle, guagillo, jalapeño, mora, mulato, pasilla, pimiento, o chile dulce, piquen, chiltepin, poblano, serrano, tornachil, cicatiquetl, si bien tienen fama de ser de los mas picantes, el chile cascabel y el habanero.
En fin, una gran variedad del vegetal que se utiliza en la cocina mexicana, donde surgen o se eligen aquellos que mejor convengan para deleitar estéticamente a los comensales e igual como símbolo de amor.
