El término de Nochebuena se refiere a la noche del 24 de diciembre, en la que comúnmente se reúne la familia y seres queridos, para celebrar el nacimiento del niño Jesús. Cabe mencionar, que tanto en la Nochebuena como en la Navidad, se combinan usos y costumbres religiosas con otras costumbres paganas. Pero sin lugar a duda es uno de los eventos más importantes para el cristianismo.
Aunque actualmente la Nochebuena celebra el nacimiento de Jesús, no todos los cristianos celebran esta festividad, ya que algunos consideran que tiene su origen en fiestas paganas. En realidad se hace mención a muchas festividades antiguas que giran en torno al 24 de diciembre, principalmente porque se trata del día en que resurge el sol durante los meses de invierno, precismanete 3 días después del solsticio de invierno, que es el 21 del mismo mes.
Se señala en algunos textos acontecimientos que se dice dieron origen a esta festividad, como aquellos que se remontan en Egipto en relación a la celebración del Dios Ra. También en la antigua Grecia, justo en esa fecha, se realizaban las ceremonias y culto al Dios Apolo, haciendo que todo el epicentro de la celebración girase en torno al oráculo de Delfos (principal templo erigido y consagrado a ese Dios). Por último y poco antes del surgimiento del cristianismo, esta era la fecha para la celebración de las Saturnales, unas festividades romanas en honor a Dios Saturno, donde las personas degustaban de un sabroso y abundante banquete e intercambiaban regalos similar a lo que se hace en Navidad, pero a diferencia de ésta, la celebración duraba 7 días comenzando el 17 de diciembre y terminando el 23 del mismo mes, permitiendo durante ese periodo llevar a cabo excesos fuera de las reglas sociales impuestas durante el resto del año.
A la religión se le sumaron rituales y prácticas que no tienen que ver con la religión, como la representación de Santa Claus o Papá Noel, este personaje de barba larga y traje rojo, que viaja en un trineo volador impulsado por renos mágicos y que lleva obsequios a los niños de todo el mundo. Es una muestra de esta particularidad, al igual que las coníferas decoradas con luces, guirnaldas y adornos.
Esta dualidad, por así llamarla, que presentan tanto la Nochebuena como la Navidad e incluso la Noche de Reyes, es uno de los fenómenos más llamativos, ya que tiene lugar en muchas partes del mundo, en culturas muy diferentes. Es importante señalar que no sólo celebran esta noche personas creyentes en países católicos, sino también aquellas otras en los que el catolicismo ni siquiera es relevante.
En los hogares, se ha vuelto una tradición mundial, colocar el famoso “Arbolito de Navidad”, símbolo inigualable de esta época. Árbol de pino que se coloca en las casas con adornos, esferas o velas. Para muchas familias esto es todo un ritual ir por el arbolito a los mercados o viveros al pie de las montañas. A últimas fechas se ha utilizado la modalidad de una vez terminada la Navidad, se regresa el pino al vivero donde se compró para que se vuelva a sembrar y así, regresar el siguiente año por el mismo árbol, evitando la tala indiscriminada.
Ya específicamente la noche de Nochebuena, gira al rededor de la cena familiar, menús que se planean y preparan con anticipación. En México se cuenta con el bacalao, los romeritos, el caldo de camarón, el pavo o la pierna de cerdo, la ensalada de manzana, el ponche de frutas y una gran lista de platillos característicos de cada región.
No puede dejar de mencionarse la música navideña, como los villancicos, con la cual se siente el espíritu navideño.
Más allá de las connotaciones que tenga la Navidad, es una época para reunirse con la familia y reflexionar sobre lo acontecido durante el año y el planteamiento de nuevos comienzos.
Pero aquí no termina la tradición mexicana de la Navidad… porque aún faltan esos personajes legendarios que buscaron el pesebre en Belén… Los 3 Reyes Magos que harán su llegada el 6 de Enero.