El Día de los Muertos, de ser una tradición íntima, familiar y hasta cierto punto un secreto cultural mexicano, se ha convertido en un fenómeno mundial a través de medios sociales, películas y eventos en muchos países, incluyendo a Estados Unidos, donde el fenómeno ha alcanzado ya una gran popularidad.
Al mismo tiempo que adultos y niños se preparan para celebrar el “Halloween” o “Noche de las Almas”, muchos de ellos, especialmente aquellos con raíces mexicanas, se preparan con altares, comidas, bebidas y música para celebrar la vida y las costumbres de sus seres queridos ya fallecidos.
Contrario a la mayoría de las culturas mundiales, donde la muerte es un tema que causa temor y sentimientos negativos, la cultura mexicana enfrenta a la muerte con naturalidad, con amor y con un buen sentido del humor.
El Día de los Muertos es una celebración que en realidad empieza desde la noche anterior, con los altares adornados con fotografías de los difuntos, la preparación de sus comidas favoritas, su bebida predilecta y sin faltar, las canciones que acortan el tiempo y la conexión entre la vida y la muerte.
En general el ambiente es de celebración de la vida de los ya fallecidos y del cariño con que se les recuerda.
Entre las nuevas tradiciones y costumbres del Día de los Muertos, existe el maquillarse la cara con la fisonomía de calavera.
El maquillaje se ha hecho tan refinado, que hay maquillistas especializados en este estilo/obra artística. Se complementa el efecto con atuendos hechos en muchas ocasiones por modistas que se dedican a este tipo de diseños.
Una de las celebraciones más importantes es La Catrina en Zapotlanejo, Jalisco, México, donde se encuentra también la figura de La Catrina más alta del mundo. Otras se llevan a cabo en diferentes ciudades como en la ciudad de San Antonio, Texas, donde se celebra “The Catrina Ball”, un evento de la alta sociedad donde el maquillaje y el atuendo son requisitos esenciales.
Otro de los efectos del Día de los Muertos fue el gran éxito, inesperado para muchos ejecutivos del cine, de la película “Coco,” que se lanzó en inglés y en español internacionalmente, causando un maremoto de atención hacia la cultura mexicana y su peculiar relación con la muerte. La película animada, se apega fuertemente a la realidad de la celebración. “Coco” es, sin duda, una de las razones por las cuales el Día de los Muertos ha ganado tanta popularidad entre jóvenes y adultos.
La pregunta obligada es ¿De dónde vienen las imágenes y las ideas de esta tradición?
El artista que más influencia ha tenido en este aspecto, es el crítico social y político, José Guadalupe Posada (1852-1913), quien creó la imagen de la Calavera Catrina, así como más de 20,000 imágenes que influenciaron la percepción de la muerte a través de la sátira y el comentario social de Posada.
A través de su arte gráfico expresaba su desdén y su odio hacia las injusticias del gobierno y la falsedad de la alta clase social. Son éstas las imágenes que sirven como punto de partida para el fenómeno actual.
Es así como el Día de los Muertos también se ha convertido en un negocio redondo para unos muy vivos.
