La pandemia del Coronavirus ha estremecido la salud, la economía, la sociedad y la cultura de países enteros. Los efectos y las consecuencias se estarán definiendo en los próximos meses. Por ahora, lo que es visible es que más de 400,000 personas han perdido la vida, las grandes economías se han derrumbado y la sociedad ha tenido que adaptarse a un nuevo estilo de vida, en el que han desaparecido los eventos masivos, tanto musicales como deportivos.
Las razones principales por la cual los eventos masivos han sido suspendidos es el gran peligro de transmisión a través del contacto y por la expulsión de particulas que expelemos al hablar o cantar.
El primer evento de propagación documentado, fue la práctica de un coro religioso el pasado mes de marzo en el Estado de Washington, en Estados Unidos. De los 61 concurrentes, 52 se enfermaron, 32 dieron resultados positivos y 20 contaban con síntomas de la infección de COVID-19.
Conscientes de la propagación de este virus, los directivos de grandes eventos, organizadores, músicos y artistas hicieron una transición hacia otro tipo de presentaciones, donde se respetaba la distancia entre el artista y el público y la separación entre los asistentes. Otra, mucho más popular, fue en la que los artistas ofrecían conciertos virtuales, algunos gratis y otros aceptando donativos durante y después de la transmisión. Este nuevo formato ha tenido mucho éxito y se ha ido sumando por grandes estrellas, quienes han abierto cuentas sólo para sus fans, en el que se puede elegir pagar una cuota para uno o varios conciertos.
The Rolling Stones
Este auge ha ido creciendo con la grabación de sus temas a través de aplicaciones como Zoom, Facebook y YouTube, las cuales les permiten obtener ciertas ganancias, como un nuevo modelo de negocio que aún no se ha definido si permanecerá.
Lo que sabemos con certeza, es que los tiempos de grandes conciertos y eventos masivos han quedado en el pasado, incluso ir al cine o las pequeñas presentaciones, son cada vez menos comunes.
Sabremos que habrá fuertes repercusiones financieras para todos. Cadenas como AMC, del negocio de cines en los Estados Unidos, están cerrando sus puertas y no sabemos cuales otras compañías subsistirán, pero seguramente todos los involucrados profesionalmente con el mundo de la música, el deporte y el entretenimiento masivo, tendrán que encontrar nuevas formas de expansión, proyección y comercialización.
Por ahora los invito a que pase en su casa una noche bohemia y celebre la vida.
Jose Rosario González
Ejecutivo de la industria de la música, ex-vicepresidente de Sony Music, cantante, compositor, arreglista y productor.
